Central de trabajadores de la Alianza Sindical Independiente (ASI) denunció este miércoles que con el nuevo sueldo mínimo ajustado por el régimen no se puede “sobrevivir ni un día al mes”.
“La familia trabajadora sigue sin ingresos ni vida digna pues con la inexistencia de un salario real y suficiente, la falta de políticas salariales, la ausencia de una política de empleo, la sustitución de la producción nacional por importaciones, hace que el trabajo no se traduzca en crecimiento ni desarrollo económico”, indica a través de una nota de prensa.
Además, ASI destacó que en Venezuela las personas están muriendo por Covid-19 y por desnutrición, pues “el salario actual tiene un déficit de la canasta de alimentos del 97,6%”.
“No sirve para pagar servicios a precios dolarizados, no se puede pagar alquiler expresado en divisas, no podemos adquirir zapatos para ir a laborar caminando, ya que el pasaje para ir al centro de trabajo también está dolarizado, y por si fuera poco, ¿con qué compramos las medicinas y remedios?, el salario no alcanza ni para comprar limones o hierbas medicinales en el mercado”, dice el comunicado.
“Desde Central ASI Venezuela, rechazamos que se siga haciendo ajustes salariales invisibles, unilaterales y sin consulta tripartita a los actores del proceso social del trabajo, esto es un retroceso, la respuesta a la crisis debe ser a través de participación de todos, en un diálogo serio, responsable y con resultados visibles y tangibles en la mesa de la familia trabajadora venezolana”.
Finalmente, los trabajadores consideran que el primero de mayo no hubo aumento salarial, ya que los aumentos siempre deben estar uno o dos puntos por encima de la inflación, y eso no ocurre hace mucho tiempo en Venezuela.
Solicitudes de ASI
Los actores políticos deben buscar los recursos para generar un ingreso o renta mínima vital de emergencia por un año a toda la fuerza de trabajo del sector público, privado y no dependiente de la economía informal.
En Venezuela, se debe impulsar una política salarial progresiva y la discusión de los contratos colectivos para iniciar un proceso de recuperación del salario por esta vía; pero esto no es posible si no hay políticas de empleo e incentivos a la producción nacional, que reactiven la economía, y para ello debe haber gobernanza y seguridad jurídica para todos los actores.
En esta nueva política salarial debe haber mecanismos complementarios del salario tales como farmacias sociales, economatos, comisariatos y cooperativas; módulos y centros de salud y atención primaria; programas de alimentos sin control social ni discriminación, para todos por igual