El papa Francisco tomó «atenta nota» sobre las restricciones impuestas por el régimen de Nicolás Maduro al voto de los más de 7 millones de venezolanos en el exterior, al permitir que solo 69 mil puedan participar en las elecciones presidenciales del próximo 28 de julio.
Así lo informó el secretario de Estado del Vaticano, el cardenal Pietro Parolin, en respuesta a una carta enviada el pasado mes de abril por miembros de la diáspora venezolana en Argentina, en la que pedían al papa Francisco su intermediación para que se les permitiera registrarse para votar en los comicios presidenciales.
«El Santo Padre ha recibido su mensaje, del pasado 2 de abril, con el cual informaba acerca de las dificultades que afrontan muchos venezolanos en el extranjero para votar en las elecciones presidenciales que se celebrarán el próximo 28 de julio», señaló Parolin en su respuesta, fechada el 6 de junio pero que se dio a conocer este martes.
«Luego de haberlo leído, el Santo Padre me ha pedido que le transmitiera su agradecimiento, asegurándole que ha tomado atenta nota de cuanto le informaba. La Santa Sede no dejará de hacer lo que esté en sus posibilidades«, afirmó el secretario de Estado del Vaticano.
En total, 69.189 venezolanos están habilitados para votar en el exterior, de los más de 7 millones de migrantes y refugiados venezolanos que hay en el mundo. En el caso de Argentina, de los más de 220 mil venezolanos que viven en el país, solo 2.639 podrán votar en las elecciones presidenciales, debido a las trabas que impuso el CNE para el empadronamiento, al exigir documentos adicionales a los previstos en la ley, y por las demoras en el proceso de inscripción.
Parolín destacó que la presidencia de la Conferencia Episcopal Venezolana ha afirmado que «el sufragio es una de las formas de expresión de la soberanía del pueblo» y que «los órganos del Estado y las instituciones políticas y sociales deben garantizar a los electores y candidatos una oportunidad real de participar equitativamente en el proceso electoral».
En su respuesta a la diáspora venezolana, el secretario de Estado dijo que reza «por Venezuela y por todos sus hijos e hijas, dentro y fuera del país» y los encomendó «a la intercesión de la Santísima Virgen de Coromoto y del Beato José Gregorio Hernández».
En su carta, enviada el 2 de abril al papa Francisco, los venezolanos en Argentina denunciaron que proceso electoral en Venezuela se desarrolla «en un ambiente de presión, persecución y hostigamiento contra dirigentes de oposición y activistas de derechos humanos», entre los que destacan la inhabilitación de la líder opositora María Corina Machado, el encarcelamiento de varios de sus colaboradores y la detención y desaparición forzada de la presidenta de la ONG Control Ciudadano, Rocío San Miguel.
«Este contexto describe condiciones que se distancian de un proceso con garantías democráticas mínimas y que lamentablemente incumple con lo establecido en el acuerdo de Barbados, suscrito entre representantes del Gobierno de Venezuela y miembros de la Plataforma Unitaria«, advirtieron.
Como parte de estas violaciones al acuerdo de Barbados resaltaron las limitaciones impuestas para la inscripción y actualización de datos de los venezolanos en el exterior en el Registro Electoral.