El papa Francisco, ingresado en el hospital Gemelli de Roma por problemas respiratorios, expresó su cercanía a los afectados por las inundaciones en Bahía Blanca, en Argentina.
El pontífice pidió consuelo para los deudos y los que sufren en estos momentos de dolor e incertidumbre, en un telegrama enviado al obispo de la ciudad, Carlos Alfonso Azpiroz.
«Apenado al enterarme sobre el desastre natural que está afectando a la región de Bahía Blanca, y que ha ocasionado tantas víctimas y daños materiales, ofrezco fervientes sufragios por el eterno descanso de los fallecidos. Así mismo, quiero hacer sentir mi cercanía espiritual a toda la población», se lee en el telegrama.
Y añade: «Suplicando al señor que conceda consuelo a los deudos y a cuantos sufren en es tos momentos de dolor e incertidumbre»
El papa también pidió que el Señor «sostenga con su gracia a todos los que están comprometidos con la búsqueda de los desaparecidos y con el arduo proceso de reconstrucción de las zonas devastadas»
Asimismo, se dirigió a Nuestra Señora de la Merced para «que interceda ante su hijo Jesucristo por todos los afectados por esta catástrofe» y concluyó impartiendo «con afecto la bendición apostólica».
Fuentes vaticanas explicaron que el pontífice, que lleva 25 días en el hospital, había sido informado de los aluviones registrados en Bahía Blanca y había mostrado su cercanía al sufrimiento de los afectados con la oración y el pensamiento.
Son al menos 16 los muertos por las inundaciones del pasado viernes en Bahía Blanca, producto de las intensas lluvias que azotaron la ciudad argentina, y se buscan a dos niñas desaparecidas.
Además, todavía hay más de un centenar de desaparecidos y 1.450 evacuados, que distribuidos en 13 centros de alojamiento.
La Empresa Distribuidora de Energía Sur (EDES) informó que se ha restablecido el suministro al 55 % y que se desplegó un equipo de 400 operarios para acelerar la reconexión eléctrica.
Los pobladores de Cerri, otra de las ciudades más afectadas de la provincia de Buenos Aires, continúan sin suministro eléctrico.
Una caída de 400 milímetros de agua en ocho horas, el equivalente al promedio anual de Bahía Blanca, durante la madrugada del viernes provocó inundaciones con efectos devastadores para la ciudad y sus habitantes. EFE