La ONG Provea denunció este miércoles que las mujeres detenidas en Venezuela viven en «condiciones inhumanas» de reclusión, al afirmar que permanecen «hacinadas, sin acceso regular a agua potable, atención médica especializada o productos para una menstruación con dignidad».
«Venezuela incumple las reglas de Bangkok de la ONU, que exigen proveer condiciones dignas, productos de higiene gratuitos y atención médica adecuada en los centros de reclusión», manifestó la ONG a través de su cuenta en X.
Esta «omisión», prosiguió, «puede constituir un trato degradante, como ha advertido el Comité Europeo para la Prevención de la Tortura».
La organización no gubernamental aseguró que familiares llevan a las reclusas comida, analgésicos, toallas sanitarias, agua para beber y el aseo personal.
«El Estado venezolano se desentiende por completo, incluso de lo más básico», añadió.
Provea recordó que al menos 2.400 personas fueron detenidas tras las presidenciales de julio de 2024, en contexto de crisis luego de que el ente electoral proclamara la victoria de Nicolás Maduro, un resultado que la mayor coalición opositora considera fraudulento, mientras reclama la victoria de su líder, Edmundo González Urrutia, actualmente exiliado.
De este total de detenidos, señaló la ONG, «aproximadamente unas 293 eran mujeres» y hoy, agregó, «92 siguen presas por motivos políticos, muchas de ellas en un sistema diseñado para olvidarlas».
De acuerdo a la ONG Foro Penal, en Venezuela hay 927 presos políticos, de los cuales 831 son hombres y 96 mujeres, la mayoría detenidos tras las presidenciales de 2024.
Con información de EFE