La ONU y la directiva ad hoj de la Cruz Roja Venezolana impuesta por el Tribunal Supremo de Justicia (TSJ) firmaron una carta de entendimiento para fortalecer el trabajo conjunto en materia de atención humanitaria y desarrollo sostenible en el país, informó este viernes la organización multilateral.
En una nota de prensa, la ONU señaló que el documento suscrito subraya la importancia de «seguir promoviendo una respuesta humanitaria eficaz y coordinada para garantizar que llegue a las personas que más lo necesitan de manera oportuna y eficiente».
Hasta marzo de 2024, el Plan de Respuesta Humanitaria alcanzó a 945.000 personas en Venezuela, de las cuales el 58 % fueron mujeres y niñas, según datos de la ONU.
El documento también establece la colaboración entre ambas organizaciones para «avanzar con la Agenda 2030 y los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) en Venezuela, enfocándose en áreas como la gestión del conocimiento, el fortalecimiento de capacidades, la asistencia técnica y la incidencia».
El coordinador residente de la ONU en el país, Gianluca Rampolla, aseguró que la Cruz Roja Venezolana «es un socio estratégico para Naciones Unidas» y que su «sólida colaboración, con un historial significativo, se ve reforzada con esta firma».
Por su parte, el presidente ad hoc de la Cruz Roja Venezolana impuesto por el TSJ, Ricardo Cusanno, expresó el compromiso de «fortalecer capacidades para la respuesta humanitaria, sanitaria y social».
La Cruz Roja nacional fue intervenida en agosto del año pasado por orden del TSJ una semana después de que la Fiscalía abriera una investigación sobre el «presunto acoso y maltrato» cometido contra voluntarios y trabajadores de la organización por parte de su entonces presidente, Mario Villarroel. Además, la justicia chavista designó una directiva para su reestructuración, presidida por Cusanno, expresidente de Fedecámaras.
Posteriormente, Villarroel rechazó la «ilegal» intervención de la organización y las acusaciones en su contra, las cuales tildó de «deshonestas». EFE