El nuevo rover Perserverance arribó a Marte, tras casi 470 millones de kilómetros recorridos, con el objetivo de buscar signos de vida microbiana antigua.
El largo y solitario viaje en el espacio que el Perseverance inició siete meses atrás se encuentra al 99,9 % y a horas de culminar, informó la NASA, que espera que la nave atraviese la tarde de este jueves la delgada atmósfera marciana y toque tierra en el cráter Jezero. Se estima que el horario de llegada será a las 20:55 GMT de no surgir inconvenientes.
Concretamente, el rover, de 6 ruedas, cerca 3 metros de largo y de 1.025 kilogramos, rastreará signos de vida microbiana antigua en Marte, recolectará y almacenará rocas y regolitos marcianos (roca y polvo) para que futuras misiones los traigan a la Tierra.
Para tocar la superficie de Marte y llevar a cabo su trabajo científico, el robot debe sobrevivir a la desgarradora fase final conocida como Entrada, Descenso y Aterrizaje. Los científicos de la NASA la denominan como los “siete minutos de terror”.