El presidente chino, Xi Jinping, instó este jueves a su homólogo francés, Emmanuel Macron, a que ambos países mantengan una actitud «razonable» dirigida a «evitar un empeoramiento de la situación en Ucrania».
«China espera una solución política y de negociación. Estamos listos para trabajar junto con Francia desde una actitud razonable y dirigida a evitar un empeoramiento de la situación», dijo Xi en una declaración conjunta tras la reunión que mantuvo con Macron en Pekín.
Xi agregó que espera que las partes implicadas en el conflicto se abstengan de lanzar «ataques contra la población civil», pidió «proteger a las víctimas» y manifestó su oposición «al uso de ataques químicos o contra instalaciones nucleares».
El mandatario chino pidió asimismo «atenuar el impacto» de la guerra, especialmente en los países en los desarrollo, y abogó por abordar «las legítimas preocupaciones de todas las partes».
«China considera que Europa debe jugar un rol independiente en un mundo multipolar. Apelamos a la cooperación para responder a estas crisis en campos como el energético o el alimenticio», agregó.
Por su parte, Macron dijo a Xi que una paz en Ucrania «debe respetar al pueblo agredido, que es el ucraniano» y advirtió de que no puede darse una «organización estable de seguridad en Europa» mientras un país del continente está ocupado.
Aunque el presidente francés aseguró que tanto Pekín como París desean «proteger el derecho internacional», también señaló que «el respeto a la soberanía y la integridad territorial de Ucrania» es la «condición para la paz duradera».
Además, subrayó que cuenta con China para «hacer que Rusia entre en razón y lleve a todo el mundo a la mesa de negociaciones».
Durante su reunión de hoy con Macron, Xi aseguró que China y Francia tienen «la capacidad y la responsabilidad de superar diferencias y obstáculos» y que deben practicar «un multilateralismo verdadero en pro de la paz, la estabilidad y la prosperidad mundiales».
China emitió recientemente un documento de toma de posición en el que pidió «una solución política» a la guerra en Ucrania, propuesta criticada por Occidente por poner en el mismo plano «al agresor y al agredido».
El mandatario chino viajó a Moscú a finales de marzo para reunirse con el presidente ruso, Vladímir Putin, a fin de exponerle sus planteamientos de paz al tiempo que ambos escenificaban la solidez de su relación.
Rusia vio con buenos ojos la disposición de China a desempeñar lo que considera un papel positivo a la hora de buscar una solución a «la crisis ucraniana» y a la iniciativa de paz «constructiva» presentada por Pekín.
En su documento, China, que se opone a las sanciones contra Moscú, defiende el respeto a la integridad territorial de los países, incluido Ucrania, y a las «legítimas preocupaciones de seguridad de todas las partes», en referencia a Rusia.
También se ha especulado en las últimas semanas sobre la posibilidad de una llamada telefónica entre Xi y el presidente ucraniano, Volodímir Zelenski, que por el momento no se ha producido.
EFE