El papa Francisco rechazó este sábado al acoso en ámbito escolar durante una audiencia con varias asociaciones italianas de maestros, educadores y padres católicos, a los que instó a trabajar contra el ‘bullying’.
También animó a transmitir a los alumnos «una nueva cultura basada en el encuentro entre generaciones» y la «responsabilidad personal y colectiva para afrontar retos globales como las crisis ambientales, sociales y económicas».
A su vez, les pidió que pongan «las bases de un mundo más justo y fraterno, con la contribución de todas las disciplinas y con la creatividad de los niños y jóvenes».
«Pero si a escuela hacéis la guerra entre vosotros, si hacéis ‘bullying’ con las chicas y chicos que tienen algún problema, esto es prepararse para la guerra, no para la paz», advirtió Francisco, que les instó a «no hacer nunca ‘bullying'».
El pontífice también lamentó que haya niños sin educación, «que van a trabajar, muchas veces explotados, y que buscan comida o cosas para vender entre los desechos».
Por otro lado, Francisco reivindicó la pedagogía cercana a dios, como «un proyecto en el que la familia tiene un lugar central e insustituible».
Justo esta semana, el papa advirtió de una «catástrofe educativa» a nivel mundial, aseguró que hasta 250 millones de niños están sin acceso a la educación y dedicó sus intenciones de oración para enero al derecho a la instrucción de migrantes, refugiados y personas afectadas por las guerras.