El expresidente peruano Ollanta Humala (2011-2016) afirmó este martes que la Fiscalía ha sido incapaz de demostrar los presuntos aportes de Venezuela a su campaña electoral de 2006, durante sus alegatos finales del juicio en el que se le procesa por lavado de activos.
«La Fiscalía ha sido incapaz de probar que hubo ingresos de aportes venezolanos, producto del peculado de (el presidente venezolano) Hugo Chávez. No ha tenido ninguna prueba», aseguró Humala a la prensa a la salida de la audiencia.
Humala afronta una petición de la Fiscalía de 20 años de cárcel por haber presuntamente promovido y recibido millonarios aportes de dinero de emisarios del fallecido presidente venezolano Hugo Chávez para la campaña electoral de 2006.
También de la compañía Odebrecht para su campaña electoral de 2011.
En una entrevista con EFE en febrero pasado, Humala aseguró que, si la compañía brasileña llegó a enviar ese dinero a Lima, lo robó su director ejecutivo en Perú, Jorge Barata.
«Si esa tesis de que, efectivamente, Marcelo (Odebrecht) había dispuesto a Barata (para enviar dinero a su campaña), lo que yo pienso, primero, (es que) no creo que eso haya pasado, pero, si es que eso ha pasado, Barata se robó la plata», aseveró.
La decisión final del proceso será anunciada el 8 de abril, una medida que podrá ser apelada, agregó la magistrada del Tercer Juzgado Penal Colegiado Nacional, que llevó adelante el juicio desde febrero del 2022.
Durante su intervención en la sala, reiteró que el Ministerio Público no ha determinado la cantidad de estos supuestos aportes a su campaña electoral de 2006, ni la forma en la que habrían llegado a la campaña, ni su ingreso a Perú.
«No ha podido probar el ingreso a Perú ni a mi campaña de 2006 de este supuesto dinero enviado desde Venezuela. Si no puedes probar eso, entonces de qué conversión estamos hablando, si no hay plata que llegó a Perú», dijo al indicar que era «obvio» que el Ministerio Público tendría que haber podido demostrar la supuesta cantidad de dinero.
Sostuvo que durante el largo juicio, se ha dado «un linchamiento político» y se ha buscado crear presión social: «Prácticamente se está pidiendo un juicio popular».
Por otro lado, señaló que la Fiscalía tampoco ha podido determinar y probar qué persona o quienes en Brasil supuestamente dispusieron el aporte a la campaña de 2011 a través de la empresa Odebrecht.
Añadió que el Ministerio Público no ha detallado cómo se habría organizado el supuesto aporte sin la existencia de reuniones previas, ni ha precisado el número de operaciones estructuradas que Odebrecht habría realizado, ni las entregas de dinero para supuestamente aportar 3 millones de dólares a la campaña de 2011.
«A la luz de este juicio, en lo que respecta a los supuestos aportes de campaña de OAS y Odebrecht, ha quedado claro que nadie sabe a la fecha cuanto dinero se aportó a la campaña de 2011 (…) ni el número de cuenta bancaria ni nombre del banco», refirió.
Humala se convirtió en 2022 en el primer expresidente peruano en ser juzgado por el escándalo de sobornos de Odebrecht, destapado en Brasil en el caso Lava Jato y con repercusión en una docena de países de Latinoamérica.