El líder de la organización humanitaria Casa de Bielorrusia en Ucrania, Vitali Shishov, quien se hallaba desaparecido desde el lunes 2 de agosto, fue encontrado ahorcado en un parque de Kiev, informó este martes la Policía de la capital ucraniana.
Por Infobae
“La policía ha incoado una causa penal según el artículo 115 del Código Penal de Ucrania (asesinato premeditado) y verificará todas la posibles versiones, incluida la de asesinato presentado como suicidio”, señala comunicado publicado en la página web de Policía Nacional de Ucrania.
“El ciudadano bielorruso Vitali Shishov, desaparecido ayer en Kiev, fue hallado ahorcado este martes en uno de los parques de Kiev, cerca del lugar donde residía”, precisó la Policía ucraniana en un comunicado difundido este martes.
Según una de las versiones que se investigan, se podría tratar de una “muerte camuflada como suicidio”, añadió la policía.
Shishov de 26 años, dirigió la Casa Bielorrusa en Ucrania, una ONG que ayuda a sus compatriotas a huir de la represión del régimen de Alexander Lukashenko. Su ONG denunció este martes una “operación planificada” por el régimen del dictador Alexander Lukashenko.
“No hay ninguna duda de que se trata de una operación planificada por los chekistas (término para designar a las fuerzas de seguridad bielorrusas, ndlr) para liquidar a un bielorruso que representaba un verdadero peligro para el régimen”, indicó la organización en su cuenta Telegram.
El activista salió a correr en Kiev el lunes por la mañana, pero no regresó y dejó de atender su teléfono celular. Amigos de Shishov dijeron que había sido seguido por “extraños” mientras trotaba.
“Vitali era vigilado y la policía (ucraniana) había sido informada de ello. Habíamos sido advertido en varias oportunidades tanto por fuentes locales como por personas en Bielorrusia de (la posibilidad de) todo tipo de provocaciones que podían ir hasta el secuestro y la liquidación”, continuó la ONG.
“Rastreamos todo el bosque donde él solía correr, pero no hallamos ningún rastro de Vitali”, señalaron en una entrada en el canal de Telegram de la BDU, organización que presta asistencia a los bielorrusos que han huido de su país.
La policía indicó que Shishov, de 26 años, tenía consigo su teléfono móvil y otros efectos personales. El activista había comentado hace unos días a sus compañeros que se sentía vigilado y que desconocidos habían intentado trabar conversación con él.