El presidente de Ecuador, Guillermo Lasso, decretó este miércoles la «muerte cruzada», medida mediante la cual se disuelve el Congreso y se convocan elecciones generales para renovar todos los mandatos, incluido el de la Presidencia de la República.
«Ecuador tiene la necesidad de un nuevo pacto político y social que le permita salir de la grave crisis política en la que se encuentra y que lamentablemente cada día se profundiza», dijo en un mensaje a la nación.
Lasso acusó la Asamblea Nacional, de mayoría opositora, de «desestabilizar» su gobierno en los dos años de gestión que lleva, incluido el juicio político en su contra en marcha.
«Es una constante obstrucción que ha generado una grave crisis política y conmoción interna que se refleja en la casi nula confianza de la sociedad ecuatoriana en la Asamblea Nacional. Para dar una salida constitucional al Ecuador he decidido aplicar el artículo 148 de la Constitución de la República que me otorga la facultad de disolver la Asamblea Nacional», anunció el mandatario.
En este sentido, Lasso solicitó al Consejo Nacional Electoral convocar de forma inmediata las elecciones legislativas y presidenciales para completar el resto del periodo de mandato.
El articulo 148 de la Constitución ecuatoriana establece que «la Presidenta o Presidente de la República podrá disolver la Asamblea Nacional cuando, a su juicio, ésta se hubiera arrogado funciones que no le competan constitucionalmente, previo dictamen favorable de la Corte Constitucional; o si de forma reiterada e injustificada obstruye la ejecución del Plan Nacional de Desarrollo, o por grave crisis política y conmoción interna. Esta facultad podrá ser ejercida por una sola vez en los tres primeros años de su mandato».