El alto representante de la Unión Europea (UE) para Asuntos Exteriores, Josep Borrell, dijo este lunes que los resultados de las elecciones presidenciales en Venezuela «no han sido verificados y no podrán considerarse representativos de la voluntad del pueblo venezolano hasta que se publiquen y verifiquen».
El jefe de la diplomacia europea instó al Consejo Nacional Electoral a que «actúe con la máxima transparencia en el proceso de tabulación de los resultados, incluyendo el acceso inmediato a las actas de votación de todas las mesas electorales y la publicación de los resultados electorales desglosados».
La UE «también pide a las autoridades que garanticen la investigación completa y oportuna de cualquier queja o reclamación postelectoral», añadió en un comunicado.
El político español señaló que, «informes fiables de observadores nacionales e internacionales indican que las elecciones se vieron empañadas por numerosos fallas e irregularidades».
Y que la UE lamenta «que no se haya aplicado ninguna de las recomendaciones principales de la misión de observación electoral de la UE de 2021».
Explicó asimismo que «los obstáculos a la participación de los candidatos de la oposición, las deficiencias del registro electoral y el acceso desequilibrado a los medios de comunicación han contribuido a crear condiciones electorales desiguales».
Además, Borrell dijo que a la UE le preocupan «las detenciones arbitrarias y la intimidación de miembros de la oposición y de la sociedad civil a lo largo del proceso electoral» y recordó que pide «la liberación inmediata de todos los presos políticos».
El alto representante europeo reconoció, por otra parte, al pueblo venezolano «por su determinación para ejercer el derecho al voto pacífica y masivamente», así como «el compromiso de la oposición con el proceso electoral a pesar de la desigualdad de condiciones».
Subrayó, en ese contexto, que «la voluntad del pueblo venezolano debe respetarse».
La UE «hace un llamamiento a la calma e insta a las fuerzas de seguridad a que garanticen el pleno respeto de los derechos humanos, incluido el derecho de reunión pacífica», dijo.
Por último, Borrell aseguró que los Veintisiete seguirán «dedicando todos sus esfuerzos políticos y diplomáticos para apoyar el diálogo y una salida pacífica y negociada a la crisis política».
Y reiteró el apoyo europeo a «los esfuerzos regionales e internacionales para facilitar el diálogo y restaurar la legitimidad democrática de las instituciones venezolanas».