El presidente de Turquía, Recep Tayyip Erdogan, insinuó este miércoles que podría dar su visto bueno a la entrada de Finlandia en la OTAN durante la reunión que mantendrá este viernes con su homólogo finés, Sauli Niinistö.
«Así lo espero. Cumpliremos con nuestro deber. Cumpliremos nuestra promesa. El viernes nos reuniremos con el señor presidente y cumpliremos nuestra promesa», dijo el político islamista al ser preguntado si, tras ese encuentro, el acceso de Finlandia será debatido en el Paramento turco la semana que viene.
Tanto Erdogan como su ministro de Exteriores, Mevlut Çavusoglu, han insistido en las últimas semanas en su postura positiva ante la solicitud de Finlandia de acceso a la OTAN, pendiente sólo del visto bueno de dos de los 29 miembros de la Alianza, Turquía y Hungría.
Mucho más dura es la actitud turca ante la candidatura de Suecia, presentada junto a la de su vecino nórdico en mayo del año pasado, en reacción a la invasión rusa de Ucrania.
Turquía considera que Suecia, a diferencia de Finlandia, no ha cumplido todas las condiciones que le impuso, como evitar las actividades en su territorio de organizaciones que Ankara considera terroristas.
El Gobierno turco ha llegado a plantear que el acceso de los dos países no se produzca al mismo tiempo, enfadado porque un grupo prokurdo representara una ejecución simbólica de Erdogan en Estocolmo, o por la quema de un Corán a manos de un ultraderechista delante de su embajada en la capital sueca.
En el anunció oficial sobre la reunión con Niinistö, el Gobierno turco ha indicado que «además de las relaciones bilaterales, también está previsto intercambiar puntos de vista sobre la solicitud de adhesión de Finlandia a la OTAN».
EFE