Poco antes de las 10:30 de la mañana de este viernes 10 de enero, Nicolás Maduro llegó al Palacio Federal Legislativo para tomar juramento, ilegítimamente, para un tercer mandato presidencial consecutivo, a pesar de haber sido derrotado en las elecciones del 28 de julio.
Contrario a la tradición, de realizar las tomas de posesión en el Salón Protocolar de la Asamblea nacional (AN), el acto se realizó en el Salón Elíptico del Capitolio.
«Juro ante esta magna Asamblea Nacional, Poder Legislativo de la República; ante visitantes y delegados de 125 países; ante el pueblo de Venezuela; juro por Guaicaipuro de los pueblos indígenas; juro por Pedro Camejo, el Negro Primero, y José Leonardo Chirinos; juro por Bolívar, por Sucre, por Urdaneta, por Manuela Sáenz; juro por la memoria eterna de nuestro amado jefe y comandante Hugo Chávez; y juró por el histórico, noble y aguerrido pueblo de Venezuela, ante esta Constitución, que haré cumplir todos sus mandatos, todas las obligaciones de la Constitución y las leyes de la República y que este nuevo período presidencial será el período de la paz, la prosperidad, la igualdad y la nueva democracia. Lo juro por la historia, lo juro por mi vida y así cumpliré y cumpliremos. Lo juro», proclamó Maduro.
El abanderado unitario de la oposición, Edmundo González Urrutia, ganó los comicios con 7.443.584 votos (67%) frente a 3.385.155 votos (30%) de Maduro, según comprueban el 85% de las actas de escrutinio del Consejo Nacional Electoral (CNE), que logró recolectar y publicar la oposición y que fueron certificadas por el Centro Carter.