Al menos dos personas murieron este domingo por tiroteos en centros de votación en Puebla, estado del centro de México, lo que suspendió de forma temporal las votaciones en mesas electorales de los municipios de Tlapanalá y Coyomeapan.
En Tlapanalá, una mujer murió por un enfrentamiento entre un grupo de hombres armados que presuntamente buscaban robar las boletas y elementos de seguridad, mientras que en Coyomeapan un hombre murió por un balazo fuera del centro de votación en una escuela secundaria.
La Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex) de Puebla informó de estos decesos al presentar un reporte de su acompañamiento de los comicios.
«Lamentamos profundamente el fallecimiento de dos personas, una de ellas en Santa María Coyomeapan y Tlapanalá, resultado de la violencia electoral en dichas comunidades», expuso Rubén Furlong, presidente de Coparmex Puebla, en una conferencia de prensa.
La presidenta del Instituto Electoral del Estado (IEE) de Puebla, Blanca Cruz García, reconoció los hechos de violencia, sin referirse a las víctimas, pero argumentó que los cierres de votaciones fueron temporales.
«(Si) hay una situación que altere el orden de la casilla (el centro electoral), de la votación, se suspende temporalmente la votación. Eso está perfectamente regulado, perfectamente normado», declaró la funcionaria a los medios.
Los cierres ocurren en medio de la violencia electoral, con 22 aspirantes asesinados reconocidos por el Gobierno, aunque grupos independientes registran más, como los 34 reportados por la consultora Integralia, que documenta cerca de 250 homicidios políticos al incluir a asesores, funcionarios y familia, por lo que los comicios de este domingo están considerados como los más violentos en la historia democrática de México.
El Instituto Nacional Electoral (INE) reconoció el sábado que no abriría 222 centros de votación en el país por inseguridad o conflictos, con la mayoría de ellos en Chiapas, que suspendió los comicios en los municipios de Chicomuselo y Pantelhó por hechos violentos como quema de boletas.
La preocupación por la seguridad crece porque estos son los mayores comicios de la historia de México, donde más de 98 millones de personas están llamadas renovar más de 20.000 cargos, como la presidencia, los 500 diputados, los 128 senadores y nueve gobiernos estatales. EFE