Los principales gremios de periodistas de Bolivia condenaron la «persecución», detenciones y amenazas contra periodistas registradas en Venezuela tras la crisis desatada en ese país después de las elecciones presidenciales del pasado 28 de julio.
La Asociación Nacional de Periodistas de Bolivia (ANPB) y las nueve asociaciones departamentales emitieron un comunicado en el que condenan «la persecución y detención de periodistas, así como las amenazas a medios de comunicación en Venezuela».
También expresaron solidaridad con sus colegas venezolanos «que desafían la censura y las prácticas represivas del régimen de Nicolás Maduro» y destacaron que pese a las «amenazas contra su libertad y su vida, se esfuerzan por cumplir con su deber de informar» y «dar a conocer al mundo las sistemáticas vulneraciones a los derechos humanos».
«Frente a la situación de extremo riesgo para el ejercicio periodístico, exigimos el cese de las detenciones arbitrarias y desapariciones forzadas de periodistas ocurridas desde las elecciones generales del 28 de julio en Venezuela«, sostuvieron los gremios bolivianos.
Además pidieron que paren los «allanamientos, clausuras, bloqueo de sitios web, confiscación de equipos, deportación de reporteros internacionales, campañas de estigmatización y desprestigio, perfilamiento y ciberpatrullaje de periodistas y medios, entre otras vulneraciones» que comete el Gobierno de Maduro bajo la «Ley contra el Odio».
«Lamentamos la actitud cómplice del Gobierno boliviano que avala el abuso de poder, la violencia institucional y el terrorismo de Estado del Gobierno de Nicolás Maduro con graves consecuencias para la institucionalidad democrática de América Latina», indica el comunicado.
Los periodistas bolivianos también exigieron al Gobierno de Luis Arce, aliado de Maduro, que tenga «una conducta coherente con la solidaridad» que tuvo Venezuela al dar asilo a «centenares de periodistas, líderes sindicales y defensores de derechos humanos bolivianos exiliados durante las dictaduras militares» ocurridas en Bolivia.
La semana pasada, el Colegio Nacional de Periodistas (CNE) seccional Caracas publicó un balance que dio cuenta de 102 agresiones a periodistas y medios registrados en Venezuela tras las elecciones presidenciales del 28 de julio, entre ellas «deportación de corresponsales extranjeros» y «detenciones arbitrarias».
El Sindicato Nacional de Trabajadores de la Prensa (SNTP) alertó recientemente de un «uso ilegal y arbitrario de las leyes antiterrorismo (…), especialmente contra los periodistas y reporteros gráficos detenidos durante las protestas postelectorales».