El presidente Alberto Fernández se refirió por primera vez al voto de la Argentina en el Consejo de Derechos Humanos respaldando una resolución que condenó las violaciones cometidas por el régimen de Nicolás Maduro, renovó por dos años el mandato de la Misión de la ONU que investiga los crímenes de lesa humanidad en Venezuela y pidió elecciones presidenciales y parlamentarias libres.
«Queremos ayudar a que los venezolanos recuperen la convivencia. En esta materia tenemos una política muy clara. Sino todo se confunde, para mí la materia de derechos humanos es central. En la Argentina costó 30.000 vidas entonces para mí no es un tema menor. Y los problemas de derechos humanos no tienen ideología, si se violan se violan«, expresó en una entrevista con el periodista Horacio Verbitsky en el portal El Cohete a la Luna.
El mandatario reiteró su respaldo a la Alta Comisionada de la ONU, en su trabajo en Venezuela.
«Bachelet es una persona a quien le tengo afecto y un enorme respeto. Fue muy severa sobre algunas cosas que dijo en su primer informe como Alta Comisionada de los Derechos Humanos de ONU (…) Para nosotros debe seguir adelante el trabajo exclusivamente del Alto Comisionado de derechos humanos y debemos colaborar para que el Alto Comisionado de derechos humanos siga trabajando con el gobierno de Venezuela y pueda instituir una agencia en Venezuela para trabajar en conjunto. «, señaló.
Fernández insistió en rechazar la política de Estados Unidos hacia Venezuela y aseguró que sería «inadmisible» una intervención militar.
Además, remarcó que mantiene claras diferencias con el Grupo de Lima y que no reconoce a Juan Guaidó como presidente interino, ni apoya las sanciones internacionales. En este sentido, explicó que al llegar al Gobierno en diciembre de 2019, ordenó levantar las restricciones que había para ingresar a Argentina sobre 400 colaboradores de Maduro.