Un estudio realizado en los Estados Unidos halló que no hubo transmisión del COVID-19 de madre a hijo durante el embarazo.
La tan temida transmisión vertical era otro de los enigmas del SARS-CoV-2 que la ciencia intentaba desentrañar. Y ahora, una investigación dirigida por Andrea Edlow, MD, especialista en medicina materno-fetal del Hospital General de Massachusetts vino a arrojar luz sobre el tema.
Financiado por los Institutos Nacionales de Salud (NIH), el estudio se centró en madres que cursaban el tercer trimestre del embarazo, que es cuando se produce la mayor transferencia de anticuerpos.
La investigación contó con 127 mujeres embarazadas, 64 con resultados de PCR positivos para SARS-CoV-2 y 63 con resultados negativos. De las mujeres con infección por SARS-CoV-2, 23 (36%) eran asintomáticas, 22 (34%) tenían enfermedad leve, 7 (11%) tenían enfermedad moderada, 10 (16%) tenían enfermedad grave y 2 (3%) tenían una enfermedad crítica.
Tras los análisis de la carga viral de las mujeres, los investigadores hallaron que “no hubo viremia detectable en la sangre materna o del cordón y no hubo evidencia de transmisión vertical”.