El presidente francés, Emmanuel Macron, y su homólogo argentino, Javier Milei, salieron este domingo al balcón de la Casa Rosada para saludar a las personas que los esperaban en la plaza frente a la sede del Ejecutivo.
Ambos presidentes se asomaron a las 12.27 hora local y durante un par de minutos saludaron al público que bajo la llovizna los estaban esperando, se tomaron una fotografía con la plaza de Mayo de fondo y estrecharon sus manos.
«Fuerza Milei», «Argentina», gritaban los presentes, a quienes Milei respondía con el brazo en alto mientras que con la otra mano sostenía una carpeta azul. En ese lapso de tiempo, el argentino hablaba a Macron, quien sonriente también saludaba.
El jefe de Estado francés -quien llegó este sábado a Argentina junto a su esposa, Brigitte Macron, para una visita de trabajo de dos días- ingresó a las 10.45 hora local, a la Casa Rosada, junto a la primera dama, donde se abrazó con Milei, quien estaba acompañado por su hermana, Karina.
Tras una reunión bilateral entre ambos mandatarios, Macron mantuvo un encuentro con empresarios argentinos.
Macron ya cenó en la noche de este sábado con el líder ultraderechista argentino en la residencia oficial, ubicada en la localidad de Olivos, en la provincia de Buenos Aires y periferia de la capital, donde se esperaba que abordaran el rechazo de Argentina al «consenso» climático y el de Francia al acuerdo Unión Europea-Mercosur.
El presidente francés partirá a Brasil a la Cumbre del G20 a las 14.30 hora local (17.30 GMT) de este domingo, desde donde viajará a Chile para una visita los días 20 y 21 de noviembre, con escalas en las ciudades de Santiago y Valparaíso.
El viaje de seis días de Macron a Latinoamérica sigue a la visita a Brasil en marzo pasado y se enmarca en la voluntad de Francia de revitalizar la asociación con la región, ante la creciente influencia de potencias como Rusia y China y el histórico anclaje de Estados Unidos.