El feminicidio de una joven de 14 años, cuyo cuerpo fue hallado desmembrado en un taller de mecánica de la ciudad de Cali, ha causado conmoción este sábado en Colombia, donde las autoridades buscan al presunto asesino que ya está plenamente identificado.
El hecho, detalló el comandante de la Policía de Cali, general Daniel Gualdrón, ocurrió en la noche del jueves cuando la menor fue enviada por su padre a hacer unas compras al mercado en el barrio San Judas de esa ciudad, capital del departamento del Valle del Cauca.
«A su retorno a la residencia, al parecer, fue llevada a este taller engañada», agregó el oficial, que detalló que cuando los policías llegaron vieron «trazos de sangre» en el establecimiento.
«Esto nos condujo a buscar en unas canecas y en una maleta que se encontraban debajo de una escalera, en un cuartillo de guardar elementos. En una caneca (y en la maleta) encontramos partes de la menor», expresó el oficial.
Gualdrón precisó que la persona que cometió el crimen está plenamente identificada como Harold Echeverry y las autoridades ofrecen una recompensa de hasta 100 millones de pesos (unos 25.000 dólares) por información que conduzca a su detención.
«Este es un hecho el cual estamos (atendiendo) con todas nuestras capacidades humanas y logísticas (…) en terminales y aeropuertos, en los barrios y los municipios aledaños a Cali», agregó el comandante policial.
Rechazo y petición de justicia
El caso de la menor ha causado rechazo y conmoción en Colombia por la forma en la que actuó el criminal.
El alcalde de Cali, Jorge Iván Ospina, manifestó que toda la ciudad «está movilizada para ubicar a este presunto homicida» y dijo que «no debe pasar de hoy su captura».
Entre tanto Alejandro Eder, alcalde electo de la ciudad y quien asumirá el cargo el próximo 1 de enero, afirmó en la red social X (antes Twitter): «Que no quede sin castigo el asesinato de la menor de 14 años. Mi solidaridad con su familia y mi solicitud a las autoridades para que antes de terminar el año se dé con el responsable y pague por esta atrocidad. Cali entera llora este horror».
Genaro González, padre de la adolescente, aseguró a la emisora Caracol Radio que «se va un ser que apenas estaba comenzando a vivir, a organizar sus ideas y su mente con muchos proyectos, muchas ganas de vivir».
«Era una niña alegre, sonriente a la que todos los conocidos llamaban ‘risitas’ porque siempre andaba con una sonrisa muy tierna», dijo el hombre entre lágrimas.
La Fiscalía ha dado un número provisional de 180 feminicidios en lo que va de año en Colombia, mientras que organizaciones de la sociedad civil como el Observatorio Colombiano de Feminicidios elevan la cifra a casi 450. EFE