El secretario de Estado estadounidense, Antony Blinken, eludió responder si su país apoya el ultimátum que ha dado el Ejército de Israel a los habitantes del norte de la Franja de Gaza para que se desplacen al sur, lo que implicaría la reubicación de más de 1,1 millones de palestinos y ha sido calificado por organizaciones de derechos humanos de «crimen de guerra».
«Nuestra prioridad es abrir zonas seguras», dijo Blinken, evitando la pregunta directa de una periodista en una rueda de prensa junto a su homólogo catarí, Mohamed bin Abderrahman, desde Doha, donde el estadounidense se encuentra en el marco de una gira por Oriente Medio.
El estadounidense aseguró que Estados Unidos está en contacto con organizaciones humanitarias, con Israel y otros países para abrir esas «zonas seguras», que consideró son «la mejor forma de garantizar que los civiles puedan estar a salvo y recibir la ayuda que necesitan».
EFE