Varios equipos de rescate con perros viajaron en las últimas horas a la isla hawaiana de Maui en busca de los posibles cadáveres de los centenares de desaparecidos tras los devastadores incendios que han arrasado numerosas ciudades.
Con 55 fallecidos confirmados, todavía no hay un número oficial de personas desaparecidas aunque el gobernador de Hawái, Josh Green, afirmó en su última rueda de prensa que todavía se desconoce el paradero de unas 1.000 personas.
«No significa que estén muertos, pero no podemos contactarlos, no podemos saber», afirmó.
Este viernes, más de 11.000 personas siguen sin electricidad, según PowerOutage.us, por lo que las comunicaciones con gran parte de la isla siguen siendo complejas.
Los mensajes de personas buscando a sus seres queridos se han multiplicado en las últimas horas. Algunos de ellos los encuentran, pero son decenas los que todavía no han podido localizarlos.
Los 55 cadáveres que se han encontrado hasta el momento se hallaron en zonas exteriores y todavía no se ha inspeccionado el interior de los edificios quemados, explicó este viernes el alcalde de Maui, Richard T. Bissen Jr. a la cadena NBC.
«Estamos esperando que la Agencia Federal para el Manejo de Emergencias (FEMA) ayude con esa búsqueda, ya que están equipados para manejar las condiciones de materiales peligrosos de los edificios que han sido quemados», precisó.
El director de la Región 9 de la FEMA, Robert Fenton, afirmó en una conferencia de prensa el jueves que equipos de búsqueda y rescate con perros procedentes de California y Washington están en Maui para ayudar en los esfuerzos de recuperación.
El condado de Maui informó en un comunicado que todavía se está trabajando para extinguir varios de los incendios que aún continúan activos y que comenzaron el 8 de agosto y precisó que hay seis refugios de emergencia abiertos.
«A los visitantes que deseen salir de Maui se les pide que reserven un vuelo con una aerolínea. Los viajeros pueden reservar vuelos a Honolulu y luego continuar en otro vuelo al continente», apuntó en su último informe publicado este viernes. El jueves, 14.900 visitantes partieron en vuelos que salieron de Maui.
Según afirmó a CNN Lauren Henrie, miembro de la organización sin ánimo de lucro Misión de Rescate de Maui, actualmente no se puede acceder a la parte oeste de la isla, porque está «completamente aislada de la comunicación y el suministro eléctrico».
Las iglesias y ONG «están enviando materiales por barco al oeste de Maui y por aire porque las dos formas de acceder al lado oeste de Maui están cerradas para todos, excepto para el personal de emergencia en este momento», precisó.
Aunque son varias las islas de Hawái afectadas, el mayor daño lo está sufriendo Maui. Las imágenes muestran zonas completamente destruidas, sobre todo en poblaciones como Lahaina, localidad histórica del oeste de Maui y una de las zonas más turísticas de la isla.
Según las autoridades, la fuerte sequía que ha afectado a las islas en los últimos meses y los fuertes vientos procedentes del huracán Dora han provocado que las llamas se extendieran a una velocidad mucho mayor.
«El cambio climático está aquí y está afectando a las islas», afirmó el gobernador, quien calificó lo sucedido como «probablemente el mayor desastre natural en la historia del estado de Hawái».
El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, decidió el jueves declarar la situación de desastre y ordenó el envío de ayuda federal para complementar los esfuerzos de recuperación estatales y locales en las áreas afectadas.
EFE