El dirigente nacional de Voluntad Popular Lawrence Castro sostuvo en una entrevista televisiva que en medio de la crisis económica, social y política que enfrenta Venezuela, el PSUV no ha entendido que lo más importante no es quién esté en el poder sino que la gente no está dispuesta a seguir padeciendo hambre y miseria.
Así lo declaró a Carlos Peñaloza en el programa En Contexto que transmite Canal i. «En el contexto actual, la dirigencia opositora debe entender que no hacemos nada tirándonos piedras entre nosotros mismos, ni tirándole piedras al Gobierno. La gente sabe que todo está mal, que se volvió a romper la burbuja del año pasado, que solo 2 % de los venezolanos gana más de 500 dólares, que el dólar seguirá subiendo y puede llegar en diciembre a 70 bolívares y eso traerá más hambre, desempleo, imposibilidad de producción y por supuesto, avivará la salida masiva de venezolanos».
«El PSUV no ha entendido que no es si ellos se quedan o si se van de Miraflores. No han entendido que el problema está por encima de ellos, de su sistema político y de control. La gente no está dispuesta a calarse seis años más de hambre».
Respecto a la primaria, las inhabilitaciones y los obstáculos que impone el régimen de Nicolás Maduro, el también politólogo, destacó que es hora de que el liderazgo asuma estos retos con madurez, como lo hizo Freddy Superlano, abanderado de la tolda naranja.
«La discusión tiene que ver con la posibilidad de lograr un candidato fuerte que se pueda enfrentar a Maduro y al aparato de propaganda del PSUV en elecciones. Superlano mostró su grado de madurez a la hora de cómo hacerle frente a las actuaciones del régimen y por encima de sus intereses, darle una derrota política al chavismo en Barinas. Demostró que sí es posible ganarle al PSUV. Superlano no está en un concurso de aplausos sino que tiene clara la realidad del país y a lo que nos enfrentamos, no se queda en promesas de salario mínimo», destacó.
Asimismo, explicó que para cambiar al país no basta solo con cambiar de estrategia frente a los embates del régimen, sino de entender que debe haber un cambio de paradigma. «Debemos entender que debe existir una política de negociación permanente, como es en cualquier país democrático del mundo -EEUU, España, Colombia, Chile-; los canales de entendimiento no se pierde porque así es el juego democrático. No podemos solo pensar en aplastar al otro».
«La oposición ha intentado de todo, sin éxito, y eso nos ha llevado a reclamar por todas las vías lo principal para el país que es la reinstitucionalización porque sino estaríamos cayendo en la lógica de la oposición cubana y nos tendremos que preparar para tener al chavismo 60 años más en el poder. Debemos cambiar nuestra realidad. Desde hace mucho, se rompió la institucionalidad en Venezuela, todo es propaganda, redes sociales, el teléfono. Pero la verdad es que hay presos políticos, gente perseguida, asediada porque no hay sistema de justicia. Debemos dejar de pensar en escándalos en el boom de las noticias amarillistas y voltear la mirada a la exigencia de la reinstitucionalización del país», insistió.
Priorizó que el venezolano necesita justicia por haber sido reiteradamente golpeada y abusada su dignidad y sus DDHH. «No tenemos cifras de homicidios, ni de desnutrición infantil, ni de suicidios, no hay cifras de nada porque no hay instituciones. Estamos viviendo en un colapso y ese es el debate que debemos dar. El pueblo necesita justicia, pero debemos entender que eso se logra con una estrategia».
Al ser consultado sobre las inhabilitaciones, enfatizó que ningún candidato sin importar el partido en el que milite está exento de ser inhabilitado, pero consideró que la estrategia frente a estas medidas de la Contraloría, debe darse en un debate sensato. «La dinámica incidirá mucho porque algunos piensan que lo debe nombrar el que salga electo el 22 de octubre, pero eso debe ser un nivel de discusión mucho más profundo, hay que apostar al entendimiento porque no hay fórmula perfecta. No podemos dejar a la población sin opción, debemos enfrentar a la política del régimen de la forma más democrática y tener un candidato unitario que es lo que nos pide la gente».