El teniente coronel de la Policía colombiana Oscar Dávila, involucrado en las interceptaciones telefónicas ilegales a Marelbys Meza, exniñera al servicio de Laura Sarabia, exjefa de Gabinete del presidente colombiano, Gustavo Petro, apareció muerto en Bogotá, informó este viernes la Policía.
«Lamentamos la muerte del señor teniente coronel Óscar Darío Dávila Torres. Nuestra solidaridad con sus familiares en este difícil momento», escribió en Twitter el director de la Policía colombiana, mayor general William Salamanca.
El cuerpo de Dávila, que trabajaba en la Presidencia de la República, fue hallado en un vehículo en el barrio de Teusaquillo y las autoridades indagan las causas del fallecimiento.
La muerte del alto oficial se produjo en momentos en que una indagación judicial busca establecer si hubo irregularidades o abuso de poder en el interrogatorio al que fue sometida Meza, señalada como autora del robo de un maletín con dinero de la casa de Sarabia.
Luego de conocerse la muerte de Dávila, medios locales informaron que este envió una carta a la Fiscalía en la que expresaba su disponibilidad para ser escuchado en una entrevista o interrogatorio para hablar del caso de Meza.
«Todo lo anterior, en concreto, tiene su génesis en las denuncias y publicaciones presentadas por la revista Semana que tratan sobre el caso de la jefe del Despacho Presidencial, Laura Sarabia, en los que presuntamente vinculan a la Jefatura para la Protección Presidencial», dice la carta.
La semana pasada, el fiscal general de Colombia, Francisco Barbosa, informó que la Policía interceptó ilegalmente el teléfono de Meza, quien dijo que fue interrogada en dependencias del palacio presidencial como sospechosa del supuesto hurto de un maletín con una suma indeterminada de dinero de la casa de Sarabia.
Por ese caso la Fiscalía llamará a interrogatorio y «en algunos casos se llamará a imputación a todos los responsables de estos hechos» que involucran «un presunto hurto, unas prácticas que fueron denunciadas esta semana y que se añade a algo que es grotesco en el país, que es que las ‘chuzadas'», como se conoce a las interceptaciones ilegales, «hayan vuelto a Colombia».
Meza fue interceptada ilegalmente porque su número telefónico fue intervenido por la Policía usando como fachada una investigación contra el Clan del Golfo, la principal banda criminal del país.
EFE