La migración fue uno de los pilares de la Cumbre de Líderes de Norteamérica que trataron el presidente de los Estados Unidos, Joe Biden, su homologo mexicano Andrés Manuel López Obrador y el primer ministro canadiense Justin Trudeau, afirmó este miércoles la la portavoz del Departamento de Estado para los medios en español, Kristina Rosales.
En entrevista para la Voz de América, Rosales explicó que las tres naciones abordaron cómo pueden trabajar conjuntamente para ampliar las vías legales de un proceso migratorio más legal, humano y ordenado, además de abordar las causas que llevan a las personas a abandonar a sus países.
Rosales señaló que uno de las grandes desafíos de la Administración Biden y el flujo migratorio que busca llegar al país; es el Congreso estadounidense que no toma acción.
«El presidente fue muy claro en decir desde un principio que envió ese pedido al Congreso, y los republicanos no han actuado en tratar de llegar a alguna conversación o un acuerdo para llegar a la reforma migratoria,» dijo.
En este sentido la portavoz recordó que la semana pasada Estados Unidos anunció la mensualmente se le permitirá la entrada legal a 30.000 migrantes de Venezuela, Cuba, Haití y Nicaragua.
«Las acciones que tuvimos que anunciar la semana pasada así como las acciones en general que esta presidencia anuncia son para lidiar con estos problemas», agregó mientras abordó la opción adicional de ampliar las visas temporales de trabajo a las ya existente.
«Es un tema del flujo laboral, que busca ver cómo se puede mejorar el flujo laboral. El movimiento de trabajadores de México y Centroamérica, para que puedan ir a Estados Unidos a trabajar, teniendo una movilidad que no caiga en el tráfico de personas.»